En octubre de 1917, se efectuó en Rusia la primera Revolución Socialista del mundo: La Revolución Rusa, que tuvo como marco la Primera Guerra Mundial. Tuvo dos fases: la Revolución de Febrero (democrático-burguesa), ocurrida entre el 3 y 27 de Febrero de 1917, que derrocó al zar Nicolás II, y la Revolución de Octubre (socialista), ocurrida entre el 24 y 25 de Octubre, organizada por Vladimir Illych Uliánov Lenin, líder del partido bolchevique, contra el gobierno provisional de Alexander Kerensky, instaurado durante la primera fase revolucionaria. Es así como consideramos a la segunda fase como un enfrentamiento entre dos grupos: los partidarios del gobierno provisional encabezado por Kerensky, y los bolcheviques seguidores de Lenin que buscaban realizar la revolución social.
En el marco de aquella división política, Kerenski lo logró evitar el recrudecimiento de la crisis interna. Los campesinos ocupaban las tierras y, aunque en el ámbito industrial los empresarios hacían algunas concesiones en favor de los trabajadores, la guerra, que exigía el incremento de la producción, impedía poner en práctica aquellas concesiones, como la reducción de la jornada laboral demandada por los obreros. La situación condujo al aumento en el número de huelgas y la violencia se redujo; se redujeron secuestros de patronos y en algunos casos los obreros amenazaron con tomar las fábricas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario